Alimentación y hábitos saludables



Los niños en edad escolar necesitan una dieta adecuada para crecer, desarrollarse, estar protegidos frente a las enfermedades, y tener la energía para estudiar, aprender y ser físicamente activos.
Durante esta época, el aprendizaje de unos buenos hábitos alimentarios será clave y determinará su comportamiento alimentario en la edad adulta, así que, la escuela será un sitio de vital importancia para fomentar y concienciar sobre los buenos hábitos de la alimentación. Prevenir entonces que adquieran unos malos hábitos alimentarios y mantener una buena alimentación es el mejor remedio para disminuir la incidencia de enfermedades como por ejemplo hipertensión, diabetes u obesidad, en la edad adulta, puesto que la posibilidad de minimizar la aparición de estas enfermedades comienza en la infancia.

La familia juega el papel más importante, el fundamental, de esta depende la alimentación del niño/a. Por lo tanto, la alimentación del escolar se basará en los hábitos saludables de la familia, la cual no debe variar en lo que come el niño de lo que comen sus padres, pero sí debemos tener en cuenta y respetar sus señales de hambre y de saciedad.

Los objetivos principales en esta etapa son:

- Asegurar el crecimiento y desarrollo del niño.
- Prevenir enfermedades de presentación en la edad adulta pero con base nutricional desde la infancia.
- Promover unos hábitos dietéticos saludables.

No podemos olvidarnos de que son niños y que la actividad física también debe formar parte de sus hábitos saludables. Fomentar momentos en los que se realicen actividades físicas será tan importante como cuidar su alimentación, por ello, es muy recomendable concienciar e inculcar en los niños que realicen actividad física de forma habitual, que esta forme parte de su estilo de vida Por ejemplo, actividades extraescolares donde realicen un deporte o realizar actividades en familia.

Como ya he dicho anteriormente, la escuela es un buen lugar y desde donde se debe educar y concienciar de lo importante que es la alimentación y la actividad física para la salud, fomentando así buenos hábitos saludables y alimentarios. La Educación Física es una buena asignatura para ello, ya que mediante el juego y la diversión, siempre será más fácil que los niños tomen conciencia. Algunos juegos podrían ser los siguientes:


1. Relevos Saludables
Se trata de una carrera de relevos entre dos equipos. Se colocarán imágenes o dibujos de alimentos en el centro de la pista, y al lado, tres aros (verde, azul y rojo). Los alumnos deberán correr hasta ellos y coger el alimento que crean conveniente para posteriormente colocarlo en uno de los tres aros, los cuales serán:


- Verde: Alimentos que se deben consumir a diario.

- Azul: Alimentos que se deben consumir con frecuencia y moderación

- Rojo: Alimentos que se deben consumir excepcionalmente


El equipo que termine antes y mejor tenga divididos los alimentos ganará.


2. Las grasas

Este juego lo utilizamos para ver la pesadez que genera tener más y más grasas en el cuerpo. El juego consiste en lo siguiente: tres o cuatro alumnos se la quedan, y su misión es pillar a los demás. Cada vez que pillan a alguien, éste se engancha a su espalda, y así sucesivamente hasta que los que se la quedan pillen a todos. Al finalizar el juego, reflexionamos sobre la pesadez y dificultad de llevar más grasas de las necesarias en el cuerpo.


3. Alimentos perjudiciales

La mitad de la clase llevarán petos negros (o de otro color) y serán los alimentos que no son saludables, como la bollería, los dulces, las golosinas etc. Estos deberán ser pillados por la otra mitad de la clase, que serán los alimentos saludables como la fruta, el pescado, las verduras etc. Una vez pillados, deberán ser llevado hasta la "cárcel de alimentos", de la que no podrán salir si no les salvan sus compañeros. Posteriormente se cambiarán los roles.















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